Lunes 12 de enero del presente año se clausuró en Las Vegas la edición 2009 de CES, una de las mayores ferias tecnológicas del mundo. Nuevos sitemas operativos, teléfonos inteligentes, ordenadores de bolsillo y televisiores en tres dimensiones han sido las estrellas de este año
Ni tan brillante como los organizadores habrían querido, ni tan deslucida como pregonan sus detractores. Hoy se clausura en Las Vegas la Consumer Electronics Show (CES), uno de los mayores escaparates anuales de la tecnología. Con la crisis económica como telón de fondo (300 expositores menos que en pasadas ediciones) 2.700 empresas de todo el mundo (siete de ellas españolas) han mostrado durante cinco días sus principales novedades. A falta de los datos oficiales, se calcula que más de 130.000 personas han visitado la exposición.
Las claves de este año han sido claras: tecnología «ecológica» y a precios razonables. Y una vez despejado el panorama de supuestas «novedades» que no son más que actualizaciones de productos que ya existían, aún queda un buen puñado de tecnologías y dispositivos realmente nuevos y que darán, sin duda, mucho de qué hablar. Entre lo más destacado, el «regreso» de Palm a la batalla de los teléfonos tactiles inteligentes. O el primer vistazo a Windows 7, la esperanza de futuro de Microsoft.
Palm vuelve al ataque
En el primero de los casos, Palm, la firma que inventó el concepto de «smartphone» y que había quedado relegada a una posición residual por su competencia, resucita con un nuevo dispositivo, llamado Pre, y un nuevo sistema operativo, WebOS, especialmente pensado para sacar el máximo partido de internet.
De la expectación generada dan buena cuenta la espectacular subida (cerca de un 40%) de las acciones de Palm en Wall Street apenas unas horas después de su presentación. Y el hecho de que nuevo teléfono ha merecido el premio a la mayor innovación de este año en CES. Se espera que durante los próximos meses podamos verlo en España.
En cuanto a Microsoft, Su «mesa táctil» basada en el nuevo Windows 7 fue sin duda una de las principales atracciones de la feria. El nuevo sistema operativo anunciado por Steve Ballmer tiene la misión, entre otras, de quitar a los usuarios el mal sabor de boca dejado por Vista. La compañía de Redmond, que había anunciado la apertura de la versión beta de Windows 7 a un millón y medio de usuarios, ha tenido que suspender su distribución a través de Internet a causa del enorme tráfico generado en su web para conseguir una descarga del nuevo producto, entre cuyas novedades se encuentran diversas funciones táctiles.
La era del miniportátil
Otra de las verdades de este año tiene que ver con los «Netbook» los miniordenadores portátiles de bajo coste inventados por Asus y que ahora fabrican ya masivamente las principales marcas. CES ha demostrado que han llegado para quedarse. Con prestaciones cada vez mayores y dignas de sus hermanos mayores, destacó en la feria el nuevo modelo de Vaio de Sony, tan pequeño que cabe en el bolsillo interior de una chaqueta y tan potente que no tiene nada que envidiar a un portátil convencional. Destacó también en este campo la tercera generación del Classmate, el portátil de bajo coste de Intel y quizá el más manejable de todos.
En cuanto a la televisión, señalar que a las pantallas extraplanas de alta definición se suma ahora otra característica que muy pronto se extenderá como la pólvora: la posibilidad de ver las imágenes en tres dimensiones. Tanto Samsung, como LG y Sony han presentado sus televisores tridimensionales, aunque la mayor parte de ellos (no todos) requieren que el espectador se ponga gafas especiales.
Una mención aparte merece también, sin duda alguna, el «móvil-reloj» presentado por la coreana LG, un dispositivo novedoso y que pronto podrá adquirirse en las tiendas de varios continentes, entre ellos Europa.
Por: Nieves, J. M.
Fuente: ABC